Hey!

Un post por Pietrus el May 7, 2015 - 0 minute read

Desde hace un tiempo hasta ahora, me ha ido antojando escribir mis “proezas” de borrachín, pues, por alguna extraña brujería tras una noche de ingesta de embriagadoras bebidas tales como cerveza, calimocho y Jägermeister en grandes cantidades, mi mente es incapaz de recordar todos los actos que cometí. Y a medida que pasan los días olvido más y más esas hazañas. Así que me apetece escribir esto, para rememorarlo cuando quiera, o si no se perderán… como lagrimas en la lluvia.

La idea es ir escribiendo a partir de ahora las noches que salga a beber y se apodere de mí ese espíritu aventurero y valeroso que me tienta a retar a los novios “armario” de tías que dudosamente sepan leer esto si no es en voz alta, o esas noches que me vuelve la añoranza de tiempos pasados en atletismo y comienzo a correr… y correr… y perderme… y seguir corriendo. También, escribiré otras noches, pues no todos los fines de semana salgo a beber (en ese caso estaría muerto ya). Muchas son las cosas que una vez azorado me ocurren en mis salidas nocturnas, y muchas son las cosas que iré escribiendo para no olvidar.

¿Por dónde empezar? Mi carrera de moñas es extensa y es difícil saber por cual comenzar este memorándum.

Tras una encuesta entre mis amigos (Grandes, mires como los mires) en esas noches peliagudas, he llegado a la conclusión de empezar por la noche que considero el inicio de mi decadencia con el alcohol.